¿Qué esperamos en esta vida? Si somos cristianos auténticos, nuestra aspiración tiene que ser llegar a estar lo más cerca posible de nuestro Señor. Para ello, tendremos que irnos desprendiendo de todo lo que nos impide la cercanía a Dios. Hay muchas cosas que nos atan, muchos intereses terrenales y mundanos que nos ocultan lo hermoso que es vivir conforme nos indica el Evangelio. A medida que vayamos desprendiéndonos de tanta superficialidad, egoísmo y podredumbre que nos atan a lo material, iremos descubriendo que merece la pena vivir siendo buenas personas que buscan ser fieles a quien nos ha creado.

No tengamos dudas: el Señor paga con creces. Siempre. Lo que hacemos por los demás, no queda sin recompensa. Nunca. Una palabra de consuelo, tiene